Día de Sant Jordí 23 de abril, libros y rosas.

Hoy Luz P. Comellas, una borreguita a la que le gustan las ciencias y esas cosas del diablo (jeje)  me dejó de regalito una rosa en mi oficina por el día de Sant Jordí. Le pedí a miss Núria que me explicara el por qué y me contó que los días 23 de abril de cada año se regalan libros y rosas en Cataluña, y que es como el equivalente al día de San Valentín.

Así que me dispuse a buscar un poco más de información y encontré que en este día en varias partes del mundo se celebra el Día Mundial del Libro, pues coincide con el aniversario luctuoso de Miguel de Cervantes y de Shakespeare, además del día de nacimiento de otros autores como Maurice Druon (uno de mis favs con su serie Les Rois Maudits) y Vladimir Nabokov, entre otros.
Además de esto, se celebra el día de San Jorge o Sant Jordí.

Cuenta una leyenda catalana que en Montblanc había un dragón que mantenía a la población asustada. Y como en toda historia en que hay un dragóm siempre hay una doncella, los pobladores de la comarca entregaban al dragón una joven elegida por sorteo con tal de que no atacara a la ciudad. El día en que la princesa fue la elegida para ser devorada, estando el dragón a punto de atacarla, llegó Sant Jordí, luchó contra él, y consiguió vencerlo clavándole su espada en el corazón.

De la sangre roja del dragón nació una rosa, que San Jorge entregó a la princesa, quien a cambio entregó un libro al valiente caballero. Aquí te dejo como ejemplo una obra del Tintoretto, que se llama San Jorge  y el dragón.

Por esta razón en Cataluña se acostumbra regalar rosas a las mujeres y ellas les regalan libros a los hombres.
Uno de mis arquitectos favoritos "del mundo mundial" como dicen mis alumnos es el buen Antoni Gaudí, un autor del modernismo catalán que adoré desde que estudié arte con mi amiga Tuti Geis. Una de mis casas favoritas de este arquitecto es la Casa Batlló, cuya cubierta semeja el dorso de un dragón con todo y escamas.

Como puedes ver en la foto pequeñita, tiene la forma de espalda de dragón, pero este acercamiento es una muy buena toma para que veas el recubrimiento con piezas vidriadas que dan el efecto de escamas y espina dorsal. Tuti me contaba que cuando iba a la escuela, pasaba por una reja de herrería hecha por Gaudí que tenía forma de dragón también y que le daba mucho miedo, cuando era pequeña:

Pienso que me gustaría vivir en un lugar donde se regalen libros y rosas. Si quieres saber más de la casa Batlló, haz clic aquí. Si quieres conocer más de la obra de Gaudí, te recomiendo que busques la Casa Milà, o el Park Güell

Hasta la historia de este viernes!